Fortaleza, bastión persa,
Inexpugnable, inapelablemente fuerte.
Así nace lo nuestro, entrando desde atrás,
uniendo lo inconexo,
Vivo para amar,
y tú ya fuiste designada,
por mi corazón escogida y por mi vida desechada,
Vives, ¿para entrar en mi casa?
Finges,¿para seguir como parte de mi alma?
Sigues, con templanza hostigando,
de dudas mi mente sembrando y quiero gritar que
¡¡NO!! Que sí, te quiero,
¡¡QUE NO!! Jamás serás mi mundo entero,
partido,dividido entre los restos de mis mitades,
un partido inacabable; disputada guerra entre dos iguales.
El tiempo decidió y sólo él volverá a hacerlo,
si dejarme de nuevo en tus brazos o vivir el estraperlo,
el mercado negro entre los dos de sentimientos,
poesía para ser cantada, darle base adecuada y el sentimiento de mi alma,
¿Suenan ya los cascabeles? ¿Vuela lejos el ave, que dice que siempre vuelve?
Sí, ambos lo hacen; mis fantasmas del pasado que aún viven entre mí como mis iguales.
Mi presente: chica rubia.
Mi pecado: la lujuria.
¿Qué puedo hacer para evitarlo? Romperlo, olvidarte, ¿acaso debo separarnos?
Como el que hay entre nosotros solo uno igual de fuerte,
el que siento por mi rubia, lo único que me da muerte,
no encuentro mi salida, sólo esperar al tiempo, y que decida la vida....
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