...

Mírame, mírame bien.
Obsérvame volar, y juégame a cazar.
Mírame, mírame bien.
Voy a ganar.

Extiendo las alas, alzo el vuelo,
hace tiempo ya lo fui, silencio.
Hace tiempo ya lo fui, negro.
Y ahora extiendo mis alas, alzo el vuelo.

¿Me ves? Mírame, mírame bien.
Sólo soy un reflejo negro,
surcando un cielo de nubes y estrellas,
plena noche, plena luna.
Caen sobre ti lágrimas rotas,
sobre tu abrigo de mis plumas.

Me alzo en vuelo, voy a tocarte.
Tocaré con las yemas de mis negros dedos,
tu dulce mejilla, luna, y romperé como una flecha
en tu corazón, y un triste lobo aúlla,
aúlla al verme volar,
volar hacia ti, mi luna.

.

Qué difícil, dadora de emociones, qué difícil.
Estamos atrapados en una espiral de aspiraciones,
de curioso nombre, de anónimas decepciones,
qué difícil, olor de mora, qué difícil.

Que sueño con ver tu cara cada viernes al amanecer,
y con aprenderme los lunares divididos en tu cuerpo,
perdidos en ti, para poderme entretener,
divertido en desconsuelo de no tejer los hilos de tu pelo.

Y soñar con desterrar el frío de mañana,
con equilibrios térmicos en abrazos de hoy,
soñar que seas luna llena en el cielo que me ampara;
soñar que tu quieres probar todo lo que doy.

Perdido, camino, perdido te encuentro.

.

Y cuando el frío venga de mañana, iré a tu cama para ahogarle.

Traidora.

Que no confiaste en mí.

So tired of listening to your complaints!

Never mistake my good nature
Don't you ever cross me, ever cross me.

Caminar

Que si se gastan mis zapatos al andar este camino,
saber que tengo siempre la armadura de repuesto,
el bálsamo de tu compañía y el destino,
que me de igual si entre gemelos es incesto,
que sé que lo que quiero es caminar contigo.

Y si se apagara mi llama con una lluvia inesperada,
sacar fuerzas del recóndito lugar donde descansas,
inmortal, pura, fuerte; ocupas nada,
pero siempre llenas todo en el lugar por donde pasas,
sólo contigo, tu luz, tu sabor de mermelada.

Y si te apagas saber que sigo andando,
siempre presto, siempre fuerte,
dispuesto a seguir tu luz iluminando
con un azul más dulce que el del cielo,
que si no es por caminar en esta vida voy sintiendo,
que no quiero pararme, que no quiero estarme quieto;
ven, ven conmigo, que si quieres volar, mi ave, saco alas,
que si quieres parar, me escondo y te relajas;
mas no me voy,pues quieras o no quieras yo te cuido,
porque no se creó algo tan hermoso para perderlo en un descuido,
que no existe en mí nada tan valioso como tu cariño,
que vive a cada paso en mí,
recordado en cada paso del camino.

Improvisar.

Siempre se me ha dado bien improvisar.

A día de hoy, gusto de reinventar mi vida cada mañana.



Hoy vi que un ángel alzaba el vuelo, para ir a tocar la luna, tan alta, tan alta en el cielo...

Cambios

Ya veis =)

Cambio el fondo a un negro de ojos cerrados, y la canción que os recibe, es un grado más íntima.

Supongo que tendré que empezar a revivir esto... casi había olvidado cuanto me gustaba y ayudaba escribir.

Ah Pau, he dejado un pequeño detalle en los colores para tí =P Si no te das cuenta me dices, pero tiene que ver con tu color preferido.

Nos vemos, mis niñas.

u_u.. no puedo más.

AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAGH

¡YA VALE! ¡No quiero seguir así!

Quiero gritar al aire, gritar al viento,

que solo yo soy dueño de mí.

Parece que el amor no es amor hasta que duele,

hasta que ya, lejos del cimiento,

la torre se desvanece.

No, no es justo por favor...

Que sólo quiero no quererla,

y cuando estoy con ella solo la digo que la quiero,

no es justo para mí,

ni para mi escaso tiempo...

Ya vale porfavor... no quiero seguir luchando contra mí,

ni contra mis sentimientos. No quiero, no debo.

Hace tanto tiempo que dejé de saber,

si perdí los papeles, si alguna vez llegué a tener.

Hace tanto tiempo que me rompes más que construyes,

hace tanto tiempo que de mi quebrada voz finges que huyes;

yo te pienso sin poder dibujarte,

y te pienso como siempre te he visto, pequeña obra de arte.

Dueles, dueles, dueles, bebo.

Que el amor no es amor, si al estar sin tí no muero.

Hora de volver.

Escapa, corre, ve.

¿No puedes ver que es tu hora, la hora de volver?

No tienes que entenderlo, pero ya lo sientes,

corre ve, te está enseñando ya los dientes,

es la hora de volver.

Nadie escapa del momento,

y tú no lo llegarás a coger.

El tren está saliendo,

el tren se va a escapar,

yo me marcho dentro,

y como ayer, no sé si volveré al lugar;

lugar aquél,

donde lágrima era felicidad,

y no había enfermedad más mortal,

que la de querer...